Feliz cumpleaños


La Universidad me tiene completamente absorbida estas Navidades. Eso me impide seguir publicando en el blog al ritmo que me gustaría. Hoy, por ejemplo, habría escrito acerca del trigésimo aniversario de la eliminación de los «actos homosexuales» de la Ley 16/1970 de Peligrosidad y Rehabilitación Social, por la que homosexuales, mendigxs, drogadictxs, prostitutas, inmigrantes en situación de irregularidad... eran penadxs con multas, cárcel o ingreso forzado en centros psiquiátricos.

Es curioso leer los debates de 1977 en los que se discutía la derogación (que no sería completa hasta 1995). Un tal señor Gallo, del Colegio de Abogados, argumenta que «la homosexualidad, la prostitución y el proxenetismo son lacras sociales que debemos combatir; no podemos permitir la convivencia con esos seres que las practican para evitar su difusión entre nosotros y nuestros hijos».

En enero de 1981, cuando se exluyó la homosexualidad de la Ley 16/1970, faltaban todavía nueve años para que la Organización Mundial de la Salud dejara de considerarla una enfermedad (la Asociación Estadounidense de Psiquiatría lo había hecho en 1973 y algún país europeo como Reino Unido no lo haría hasta 1994). Si tuviera tiempo y no hubiera una pila de investigaciones pendientes junto al ordenador, enlazaría con la patologización de la transexualidad, la campaña en su contra, los debates en el movimiento trans y los enfrentamientos dentro del movimiento LGTB+ del estado español. Pero no, no tengo tiempo. Así que sólo dejo de regalo un vídeo de RTVE en el que Rosa María Calaf entrevista a algunxs viandantes sobre su opinión acerca de la homosexualidad en 1981.

1 reacciones

  1. Buffff, las opiniones del vídeo de RTVE en los 80 me parecen escalofriantes. Por un lado creo que ahora si se hiciese ese vídeo de nuevo la gente o la gran mayoría contestaría de una manera más políticamente correcta que dando su punto de vista. La sociedad ha cambiado, hemos cambiado, pero aún no sé muy bien cómo ha sido ese cambio y sí el cambio es cualitativo o tiene que ver con "no parecer carca" en la respuesta y sí posmoderno. Por otro lado me recuerda a las opiniones que aún hoy muchos de mis familiares mantienen. No debemos olvidar que la década de los 80 fue prácticamente ayer y que aún pese a que hemos cambiado mucho aún no es suficente.
    Nuevamente, gracias por tus entradas, tu blog es muy interesante!

Publicar un comentario